miércoles, 22 de julio de 2009

Libertad.

Me disuelvo y no pienso otra cosa
que dejar de ser.

Libertad.



Miguel.

viernes, 10 de julio de 2009

Ceguera.

Camina de frente con los ojos cerrados
hasta chocar con alguna pared
o tropezar y caer al suelo.

A veces algo inesperado
nos hace conscientes de lo ciegos que somos.

Hoy traté de revivir a un hombre,
y me vi reflejado tratando de revivirme a mi mismo.
Miré justo un año atrás,
me vi tratando de revivir ese amor enorme y deshecho...

Al final, alguien más terminó diciéndome que no había nada qué hacer.

Quizá nunca lo hubo.

Me ví a mi abriendo los ojos,
entre dos espejos y repeticiones sin fín.

Hoy que la hipocresía sonríe, pero de mi lado.
Ahora que me callo y sigo observando,
que también miento,
soy indiferente.
Hoy que ya no soy como era antes,
que simplemente ya no me importa.

Comienzo a ver qué pendejo he sido tanto tiempo.
empiezo a asimilar la hipocresía y la mentira
como una práctica recurrente e inocua
si a nadie le importa, a nadie puede hacerle daño.
Nadie se preocupa por alguien más,
más que por sí mismo.

Nadie sufre por alguien más,
mas que por su propio miedo y orgullo.

Desde ese momento,
vengo conociendo que todos engañamos a todos
bueno... lo sé desde siempre,
pero también me engañaba a mi.

Y esas miradas, esas pausas, las actitudes sobreactuadas...
cuántos engaños atrasados vengo a descubrir con el tiempo.
Y yo pensando que debía ser completamente honesto, sincero,
congruente... aunque claro que también mentía.
Pero de una forma más tonta.

Me veo hacia atrás, ahi.
Con mi moral de papel,
como monografía de primaria.
Con mis ideales, mis sueños, mis principios...

Y me admiro.

¿Qué puta madre pasó con el amor?
La vida se vá, así como así.
Se nos va entre un montón de pendejadas.
Y hoy ya no sé,
si debo seguir dando compresiones,
aguantar el asco de darle insuflaciones a un rostro frío y cianótico,
o dejarme morir.

Estoy cansado. De una y otra vez el mismo ciclo predecible.
Ya no puedo mas que ver siempre un doble juego...
Que quiero empezar a confiar.
Necesito confiar de nuevo, con los ojos bien abiertos.
Y de nuevo todo comienza...

Te necesito para romper los espejos.


Miguel

Perdón, yo no soy tan divertido.

Puedo deshacerme en carcajadas
tirarme al suelo y llorar de alegría,
pero siempre se me olvidan los chistes
y soy un tronco tartamudo para contarlos.

Cuando tengo que inventar algo,
cuando estamos mirándonos a los ojos.
Prefieron quedarme así y decirlo todo con una sonrisa.
La verdad es que las palabras huyen de mi como peces veloces.
No alcanzo a agarrar uno.

Y es así que luego no sé de qué hablar
a veces prefiero escuchar e imaginar cada palabra que me dices.
Me cagan las bromas de machito, los comentarios faroles,
y me fijo en los detalles más insignificantes
que para mi tienen mucho de bellos.

Que no sé de autos, de tiendas, perfumes,
accesorios, antros, whiskey... no sé un carajo de todas esas estupideces.
No sé bailar mas que como chango loco,
aunque me muero de ganas de aprender salsa y tango.
Ni siquiera sé manejar.
Nunca he ido a Europa, ni salido de México...

Que sí, la pena me pasa a chingar,
aunque siempre me termina valiendo madre.
Y también, que soy un simple,
un inadaptado, un equis.
No tengo estilo ni pretenciones vacías.

Sólo busco ser feliz,
pero no así, mi vida.
Perdón, yo no soy tan divertido.

Have fun.

miércoles, 1 de julio de 2009

Disculpas a la chica de paquetería.

Es de pelo chino, castaño claro.
Con acné y unos ojos chistosos
de esas chicas que no son bonitas,
pero que te ganan por su actitud y su sonrisa.

Mil disculpas chica, pensé que te habías robado mi cel.
¿Por qué lo habrías hecho? si está bien viejito y rayado.
Pero la verdad es que soy bien wey.
De seguro yo dejé la mochila abierta por descuido
y el cel... bueno, con la pena del mundo, lo había guardado en otro lado.
Ya te iba a reclamar hoy, con todo y mi ticket para demostrar que había ido ese día.

Perdón por la mala vibra, si te llegó o no.
Buena vibra siempre.

Yo.